Manual del Consagrado
La consagración total a Cristo-Sabiduría por medio de la Virgen María, expresión vital de la espiritualidad de San Luis de Montfort, ha vuelto a movilizar los anhelos y las aspiraciones del mundo cristiano. El Papa Juan Pablo II con su vida, sus palabras y actitudes ha despertado la atención sobre este poderoso medio de santificación.
Muchas son las personas que ya han hecho y viven esta consagración y quieren ahora renovar con creciente entusiasmo su vida cristiana en pos de María. Muchas otras buscan conocer, preparar, hacer y vivir su compromiso bautismal con Jesucristo a través de su consagración a la Madre de la Iglesia. Unas y otras acuden en más de una ocasión a nuestro Centro Mariano en busca de orientación y alimento para vivificar su consagración total.
No siempre es posible un seguimiento personal. Es así como las páginas que siguen quieren responder a la búsqueda de los fieles devotos de María y suplir nuestra personal limitación.
Tras los testimonios de vida, centrados en la actitud y mensajes de los Romanos Pontífices, entraremos a estudiar lo que es y ha significado la consagración para el antiguo Israel y para los creyentes del primer siglo cristiano. Esto nos llevará a considerar el bautismo como punto de partida de la vida consagrada del cristiano. El bautismo es, en efecto, una consagración total a Jesucristo. Una consagración que tiene sabor mariano. Momento capital en la vida del creyente en que María queda constituida como Madre suya.
Una serie de meditaciones ayudará a preparar la consagración. Es una posibilidad entre muchas otras.