DEVOCIONARIO

Amigo Católico:

Este Devocionario, fruto e instrumento de las Misiones Populares que voy predicando en los pueblitos de los Andes y en otras partes, me animó a prepararlo el Arzobispo de Huancayo. Durante los meses en que evangelicé, a caballo, los 29 pueblos afectados por el terremoto del distrito de Pariahuanca, preparé la primera edición, que imprimí en Huancayo el 15-5-1970. Las dos siguientes ediciones las aprobó el Obispo de Huancavelica, y las preparé en Kichuas (Pampas), la del15-5-1971, y en Lircay, la del 15-5-1972.

San Pablo nos dice: «¡Alégrense Uds. siempre en el Señor! Se lo repito: ¡Alégrense!» (Filp 4,4). Porque Jesucristo es la radical y única solución, con que nos liberamos (Rom 8,2) de todas las esclavitudes, también de la esclavitud del pecado, a través del perdón (Jn 20,23), y de la esclavitud de la muerte (que es fruto del pecado), a través de la resurrección (Jn 6,54). ¡Ojalá! este Devocionario, ayudándonos a encariñarnos con la Biblia, en la que Dios nos habla, nos facilite un encuentro irreversible con la fuerte y encantadora persona de Jesucristo, que está incorporado solidariamente con todos los hombres (pág. 295), luchando (a su lado) por cuya perfección integral (pág. 291), encontraremos el único camino (Mt 25, 34) para alcanzar nuestra misma perfección eterna en la indescriptiblemente gozosa amistad trinitaria (Jn17,21; y pág 396).

P. Luciano Ciciarelli
Sacerdote Monfortiano